Con este título y con motivo de la Capitalidad Iberoamericana de la Gastronomía de Córdoba en 2014, hemos coincidido en este bella ciudad andaluza un grupo de blogueros y de personajes relacionados con la gastronomía.
Con una agenda bastante apretada, le hemos sacado todo el jugo a la experiencia.
Comenzamos con una presentación en el Hotel Eurostars Palace, allí los organizadores del evento, Bodegas Mezquita, Mercado Victoria y Grupo La Montillana nos dieron la bienvenida junto a otros patrocinadores del evento.
La primera noche disfrutamos del embrujo de las calles que rodean la Catedral de Córdoba y nos dirigimos a Bodegas Mezquita para disfrutar de un espectáculo flamenco, después en otro de sus locales nos tenían preparada una cena con un menú 100% cordobés.
Día 2: Destino Priego de Córdoba, mi pueblo, DO Aceite Priego de Córdoba, allí pudimos disfrutar de un desayuno molinero y realizar una cata de aceite dirigida, tras lo cual visitamos el Barrio de la Villa y nuestra admirada Fuente del Rey. Como la agenda era apretada se nos quedaron atrás muchos rincones pero espero que sea un incentivo para que los de fuera quieran volver a conocer toda nuestra riqueza patrimonial, cultural y gastronómica.
La siguiente visita fue a la bodega Pérez Barquero de Montilla, en la que su anfitriona, Adela, junto a trabajadores de la DO Vinos Montilla-Moriles nos acogieron y nos enseñaron a apreciar la cultura del vino. Allí mismo nos agasajaron con una comida regada con caldos de la tierra.
La noche venía cargada de sorpresas, descubrir los rincones del Palacio de Viana, en una visita privada y a continuación vivir el espectáculo "Un Musical de Palacio". Maravillosa experiencia para los sentidos, el olor, la música y la teatralización con zarzuela que terminaba en el banquete de una boda, servido por Kisco García, estrella Michelín de la ciudad. Al término de la velada pudimos conversar con él, persona sencilla en el trato y muy agradable.
Día 3: Bien temprano rumbo a la DO Los Pedroches, allí disfrutamos de una cata de jamón y después directamente a comerlo en el desayuno. Visitamos una finca en la dehesa, el paisaje en un día de llovizna era espectacular.
Nuestra próxima parada fue La Taberna del Río, nos habían preparado un fantástico almuerzo que vino con una gratísima sorpresa y es que la Cofradía Gastronómica del Salmorejo Cordobés nos había nombrado en su última junta "Embajadores del Salmorejo", fue muy emocionante y ahora tenemos el compromiso de divulgarlo por doquier y hacer gala de tal distinción.
A las 9, nos fuimos a la Catedral de Córdoba, antigua mezquita. Sin duda alguna, uno de los más espectaculares monumentos de la humanidad, vivir "El Alma de Córdoba" es vivir la evolución histórica que la convirtió en mezquita para siglos después retornar a su religión original.
El juego de luces y la narración nos van guiando por la vida del monumento hasta llegar al momento cumbre y en el cual nos encotramos en la actualidad. Gracias al cuidado por parte de la Iglesia, a través del Cabildo, hemos podido conservarla hasta nuestros días respetando su pasado.
La cena fue en el Mercado Victoria, lugar "de moda" y muy ambientado. Nos agasajaron con una muestra de todo lo que se puede disfrutar en los diferentes puestos y la verdad es que todo estaba riquísimo!!!
Terminamos con una copa el el Sojo Mercado y las risas y anécdotas se sucedieron contínuamente.
La mañana del domingo la dedicamos a dar un tranquilo paseo por el casco histórico, la judería: la calle de Las Flores, la Sinagoga, el Zoco... mis compañeros se fueron a disfrutar del relax de los baños árabes y yo lo dediqué a contemplar el Patio de los Naranjos y el sonido del campanario de la Catedral.
Gracias a todos por el trato recibido y por estos días que nos habéis ofrecido.
Buen aceite, jamón del bueno, una gastronomía genial, cultura, patrimonio:
Con una agenda bastante apretada, le hemos sacado todo el jugo a la experiencia.
Comenzamos con una presentación en el Hotel Eurostars Palace, allí los organizadores del evento, Bodegas Mezquita, Mercado Victoria y Grupo La Montillana nos dieron la bienvenida junto a otros patrocinadores del evento.
La primera noche disfrutamos del embrujo de las calles que rodean la Catedral de Córdoba y nos dirigimos a Bodegas Mezquita para disfrutar de un espectáculo flamenco, después en otro de sus locales nos tenían preparada una cena con un menú 100% cordobés.Día 2: Destino Priego de Córdoba, mi pueblo, DO Aceite Priego de Córdoba, allí pudimos disfrutar de un desayuno molinero y realizar una cata de aceite dirigida, tras lo cual visitamos el Barrio de la Villa y nuestra admirada Fuente del Rey. Como la agenda era apretada se nos quedaron atrás muchos rincones pero espero que sea un incentivo para que los de fuera quieran volver a conocer toda nuestra riqueza patrimonial, cultural y gastronómica.
La siguiente visita fue a la bodega Pérez Barquero de Montilla, en la que su anfitriona, Adela, junto a trabajadores de la DO Vinos Montilla-Moriles nos acogieron y nos enseñaron a apreciar la cultura del vino. Allí mismo nos agasajaron con una comida regada con caldos de la tierra.La noche venía cargada de sorpresas, descubrir los rincones del Palacio de Viana, en una visita privada y a continuación vivir el espectáculo "Un Musical de Palacio". Maravillosa experiencia para los sentidos, el olor, la música y la teatralización con zarzuela que terminaba en el banquete de una boda, servido por Kisco García, estrella Michelín de la ciudad. Al término de la velada pudimos conversar con él, persona sencilla en el trato y muy agradable.
Día 3: Bien temprano rumbo a la DO Los Pedroches, allí disfrutamos de una cata de jamón y después directamente a comerlo en el desayuno. Visitamos una finca en la dehesa, el paisaje en un día de llovizna era espectacular.
Nuestra próxima parada fue La Taberna del Río, nos habían preparado un fantástico almuerzo que vino con una gratísima sorpresa y es que la Cofradía Gastronómica del Salmorejo Cordobés nos había nombrado en su última junta "Embajadores del Salmorejo", fue muy emocionante y ahora tenemos el compromiso de divulgarlo por doquier y hacer gala de tal distinción.
A las 9, nos fuimos a la Catedral de Córdoba, antigua mezquita. Sin duda alguna, uno de los más espectaculares monumentos de la humanidad, vivir "El Alma de Córdoba" es vivir la evolución histórica que la convirtió en mezquita para siglos después retornar a su religión original.
El juego de luces y la narración nos van guiando por la vida del monumento hasta llegar al momento cumbre y en el cual nos encotramos en la actualidad. Gracias al cuidado por parte de la Iglesia, a través del Cabildo, hemos podido conservarla hasta nuestros días respetando su pasado.
La cena fue en el Mercado Victoria, lugar "de moda" y muy ambientado. Nos agasajaron con una muestra de todo lo que se puede disfrutar en los diferentes puestos y la verdad es que todo estaba riquísimo!!!
Terminamos con una copa el el Sojo Mercado y las risas y anécdotas se sucedieron contínuamente.
La mañana del domingo la dedicamos a dar un tranquilo paseo por el casco histórico, la judería: la calle de Las Flores, la Sinagoga, el Zoco... mis compañeros se fueron a disfrutar del relax de los baños árabes y yo lo dediqué a contemplar el Patio de los Naranjos y el sonido del campanario de la Catedral.
Gracias a todos por el trato recibido y por estos días que nos habéis ofrecido.
Buen aceite, jamón del bueno, una gastronomía genial, cultura, patrimonio:
#ILikeCórdoba
