Comenzaba un artículo de "El Comidista" de 2016 diciendo así:
"Descubrir por qué salen bien o mal no es fácil. Menos mal que nosotros –con un poco de ayuda de la física, y otro poco de la química– lo hemos hecho por ti"
Pues el artículo, como todos los de este sitio, está genial y os servirá para descubrir los fallos que os hayan ocurrido. Os dejo la receta tal y como yo la hago.
Yo hago 14 galletas
- 240 g de harina de trigo normal
- 1 cucharadita de bicarbonato sódico
- 1 cucharadita de levadura química tipo Royal
- 1 cucharadita de sal
- 140 g de mantequilla a temperatura ambiente
- 100 g de azúcar moreno
- 80 g de azúcar blanco
- 1 cucharadita o más de aroma de vainilla
- 1 huevo grande
- 200 g de pepitas de chocolate negro
Tamizar la harina con la sal, el bicarbonato y la levadura química. Reservar.
En un bol batir la mantequilla junto con los azúcares con una varilla eléctrica durante 5 minutos, hasta conseguir una crema esponjosa. Añadir a esa masa la vainilla y el huevo, batiendo después hasta su completa incorporación.
Agregar los ingredientes secos tamizados y mezclar hasta que estén perfectamente integrados.
Añadir las pepitas de chocolate repartiéndolas bien por toda la mezcla.
Tapar el reciente, meterlo en la nevera mientras precalentamos el horno a 180 grados con calor arriba y abajo. (Si tenéis paciencia dejarla 12 o 24 horas)
Colocar una lámina de papel sobre la bandeja del horno. Sacar la masa de la nevera y con la ayuda de una cuchara o de un sacabolas de helado, ir cogiendo porciones para hacer con las manos pelotas, yo hago 14.
Colocar las bolas sobre el papel de la bandeja, separadas entre sí, para que no se peguen al extenderse. Yo utilizo 2 bandejas.
Introducir la bandeja en el horno y cocer durante 13 minutos aproximadamente o hasta que las galletas hayan adquirido su forma final y un ligero tono dorado.
Sacar la bandeja del horno y dejar enfriar las galletas al menos 15 minutos antes de comerlas. Recién horneadas aún están blandas así que hay que tener cuidado de no romperlas.